La etapa 16 del GR 7 comienza en Mont-Ral volviendo sobre los pasos de la etapa 15 hasta llegar, desde el refugio Musté Recasens, al cruce de la salida del pueblo. Aquí, el sendero toma un camino en descenso y, dejando a un lado el Mas del Sastre, avanza hasta encontrar las casas del Bosquet, las cuales dejamos de largo para continuar hacia las ruinas de Mas Cisteró.
El sendero prosigue por pista y, más adelante, bordea las Cingles dels Solans entre campos de cereal y el pueblo de L’Aixavega antes de encontrar un cartel señalizador hacia la Font Fresca. Poco después, comienza un tramo de ascenso entre vegetación cerrada de avellanos y rododentros y, dejando a la derecha las formaciones de la Punta de Bayrina y el Puig Pelat, la senda alcanza la altiplanicie superior.
El GR 7 avanza hasta llegar a la altura de la sierra de Vicent y enlazar con una pista por la que continúa para entrar en la sierra de la Mussara. Así, deja atrás l’Alt Camp mientras se introduce en Baix Camp siguiendo el camino de la pista hasta encontrar un mirador con vistas al mar en el cortado de la sierra de la Mussara. Entonces, comienza un continuo cruce en el camino con varios senderos en el que encontraremos el GR 65.5 en dirección a Albiol, el GR 65.5 hacia Prades o el GR 172 en dirección a Reus. Más adelante, el sendero se encuentra con el PR C-6 hacia Prades, primero, y con el PR-C 6 a La Febró, éste poco antes de alcanzar el Coll de Agustenc, donde encontramos el cruce con el PR-C 87 desde La Mussara a La Febró.
El GR 7 avanza siguiendo la pista hasta llegar al mirador de La Punta y cambiar su trazado por un sendero que desciende en zig zag para desembocar en la carretera, a la altura del Mas dels Frares. Después, cruza el asfalto y sigue descendiendo por una pista hasta llegar al fondo de la garganta, en la zona de El Gorg del Mas del Frares. Comienza entonces un tramo de ascenso siguiendo la margen derecha de una de las gargantas que nos lleva hasta una pista que, más adelante, se convierte en sendero mientras sube hacia las ruinas de Gallicant.
En este punto, a mano izquierda quedan las vistas del Puig de Gallicant, mientras que a la derecha se abre un barranco frente al cual contemplamos la villa de Siruana antes de continuar el camino bordeando por la derecha el Puig de Gallicat. Enseguida, el sendero comienza un descenso por un tramo pedregoso que se puede complicar debido a la presencia de piedras sueltas y, un poco después, desemboca en Arbolí, dando por finalizada la etapa 16 del GR 7.